La Aldea

Otra vez me quedo en casa y no puedo o mejor dicho, no me atrevo a ir a dar la clase a La Aldea. El motivo es que la carretera del norte, tristemente célebre esta semana , no estaba abierta hasta las dos de la tarde, lo que por las dudas me obligaba a desplazarme por el sur. Pero a la altura deTasarte, la copiosa y abundante lluvia ya corria por encima de la carretera en cantidades que parecían ir a mas. De esta manera, por temor a no poder pasar de Tasarte o a tener un percance en la carretera por culpa de las piedras que la lluvia desprende continuamente he decidido que me quedo en casa.
Esto que me pasa a mi no es un tema aislado que afecta a dos o tres profesionales. Muchos son los que no pueden desplazarse con tranquilidad y otros que obligatoriamente se la juegan cuando la borrasca viene del norte. Si nosotros no podemos entrar y ellos no pueden salir.....¿entonces?
Desde aquí animo al termino de esa carretera que tanta falta hace, viendola como algo necesario para el transcurso normal de la vida de un autóctono y de un foraneo al mismo tiempo.

A ver como organizo la semana que viene y si puedo arreglar las cosas para dar clase el lunes y el martes.



En la foto la última vez que nos pilló lluvia volviendo por el norte....